Ya están aquí las vacaciones de verano, época en la que las comidas fuera de casa o del cole se vuelven más frecuentes, por ello quería darte algunas ideas para cuando vayas a comer en un restaurante con los más pequeños:
- Puedes aprovechar esta circunstancia, para pedir algún plato que no soláis comer en casa y así poder invitar a los niños a que prueben sabores o alimentos que hasta ahora no conocían, por ejemplo platos típicos de la zona en la que estéis.
- Una buena recomendación en este sentido, es no decantarnos por los llamados ‘menús infantiles’, que suelen ser de calidad y variedad inferior al resto de los menús, en cambio, podemos aprovechar la curiosidad que puede tener nuestro hijo o hija por lo que estamos comiendo nosotros.
- En el caso de que sean niños pequeños, que no pueden adaptarse a los cambios de horarios, y para evitar que se pongan nerviosos esperando la comida, puede ser buena idea intentar darles de comer antes, sea en casa antes de salir o llevándonos algo de comida de casa (puedes ver algunas ideas en: COMER AL AIRE LIBRE CON NIÑOS), luego podrán probar de lo que pidamos, pero ya no lo pasarán mal mientras llega la comida.
Intenta reservar mesa con antelación, para evitar que los pequeños se pongan nerviosos ya en la espera, y no olvides avisar de que vas con niños.
¡Feliz verano!
Ana del Villar
Dietista. Ingeniera agroalimentaria